Comienzan a subir las temperaturas y cada vez se acerca más la llegada del verano, lo que para muchos es sinónimo de vacaciones o escapadas fuera de la ciudad, para descansar y desconectarse del trabajo y otras preocupaciones.
Sin embargo, gran parte de la población debe enfrentarse cada año a la intranquilidad de dejar sus viviendas vacías o encargadas a algún cercano para evitar ser víctimas de intrusos o algún robo.
Para este tipo de situaciones es que la domótica se ha ido adaptando y creciendo junto con las nuevas tecnologías para lograr crear casas inteligentes que sean capaces de entregar el confort y seguridad que las familias necesitan.
¿Cómo funciona la domótica?
La domótica se beneficia del Wi-Fi del hogar, que permite que los sistemas domóticos interactúen y respondan a los comandos del usuario con todos los accesorios conectados a la misma conexión a Internet.
Esta tecnología es capaz de controlar luces, electrodomésticos, ventilación, persianas, sonido y todo lo conectado al sistema a partir de las instrucciones de un algoritmo o programa previamente establecido por el usuario de la casa. En definitiva, la domótica puede mejorar la calidad de vida, reducir las tareas del hogar, mejorar el bienestar y la seguridad, y racionalizar el consumo energético.
Beneficios de las alarmas inteligentes
Una alarma inteligente es un sistema de seguridad para el hogar que se comunica con el propietario a través de una red Wi-Fi y una aplicación móvil. Esta cualidad nos permite controlar la situación de nuestro hogar en cualquier momento a través de un sistema de alerta.
Además, estos dispositivos representan un ahorro económico al no tener que contratar una empresa de monitoreo y pagar una cuota mensual por sus servicios, lo que para muchos es importante en el contexto actual en que muchas de las facturas llevan meses al alza.
Este tipo de alarmas tiene la características de enviar imágenes y vídeos a nuestros smartphones en tiempo real a través de una aplicación móvil que permite controlar la vivienda en cualquier momento y desde cualquier lugar.
Asimismo, le entrega mayor tranquilidad al usuario ya que al momento de detectar una anomalía les envía una alerta por mensaje.
Otro beneficio que ofrece esta avanzada tecnología es que permite que el dueño de casa se comunique -desde cualquier lugar del mundo- con quien esté dentro la vivienda, gracias a su conexión en tiempo real.
¿Qué necesito para tener un sistema smarthome?
La base fundamental para convertir un hogar en un hogar inteligente es tener una buena conexión a Internet para mantener su funcionamiento óptimo y facilitar el desarrollo de nuevas tecnologías.
En este sentido, generalmente se recomienda que al contratar internet hogar se prefiera la fibra óptica porque permite transmitir datos a mayor velocidad y cubrir mayores distancias, lo que es beneficioso para conectar diferentes dispositivos a la misma red en espacios más amplios.
Con una velocidad de 300 Mbps ya se podría tener una buena experiencia de navegación, pero si eres de los que realmente disfrutan de diferentes dispositivos o compartes hogar, es mejor considerar al menos 600 Mbps.